JULIO Y MARÍA.
Para mí, Julio y María son el descubrimiento del amor a la Vida.
La fuerza tenaz, intensa, de los que nunca se rinden.
Julio y María son el complemento vitamínico del Espíritu Iar.
Cómo me gusta verlos cada mañana de frío o cada mañana de sol,
Junto al mar o a la vera del río.
Son geniales, buen humor, sencillez, sabiduría, camaradería, compañerismo, solidaridad,…
Son muy buena gente y les quiero.
El mundo sin ellos sería más vacío, más cobarde y cruel.
Con ellos, es más divertido sensato y vital.
Julio, Druida de brebajes de intensas yerbas curativas.
María, poetisa de verdes valles y de arroyos cantarines.
Julio, ejemplo vivo de las nuevas generaciones.
María, fuerza femenina a imitar.
Julio y María, María y Julio,
Pareja sin igual,
Suben montes, bajan a los ríos,
Ojean sobre el mar, …
Son maravillosos
Porque nos enseñan a convivir
En un mundo real:
Solamente nos falta, nos falta,
Parecernos a ellos un poquito más.
Tres Hurras por Julio y por María.
JUAN, EL SENDERISTA.
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