sábado, 22 de diciembre de 2007

O PIRATA BARBUCHÁN XA TEN RELEVO


Pasaron los años ..., las persecuciones fueron intensas, los peligros acechan aún hoy en día, no es fácil la vida de pirata. Muchos días buscando los tesoros de los sentimientos ocultos, la negra noche y el titilar de múltiples estrellas, enfin, saber que la lucha imposible contra el tiempo se manifiesta cada vez que tu hijo te sorprende. Porque es así, ahora es bucanero y navega por el Caribe. Está a las órdenes del pirata sin barba y algún día, lo veo venir, no tendré que hacer nada en las aguas de las palabras por decir, de las musas evocadoras, en las turbulencias inhóspitas de un espacio sin luz y de las lluvias incesantes de la musicalidad incierta. Es cierto, tantos años me quedan por vivir y observo que mis hijos realizan día a día actividades que ni siquiera fui capaz de soñar. Que vana veo a mi experiencia, viéndoles a ellos siento la necesidad de aprender y aprender, y a la vez, me siento tan y tan pequeño.
¿Cómo es posible sentirse tan joven con hijos que te recuerdan con sólo verlos la edad que tienes que tan irremediablemente avanza ...?

Soy el pirata Barbuchán y me quedan pocos viajes que realizar al mando de mi nave. Estoy pensando volver a mi tierra y dedicarme al huerto mientras la niebla de un frío día de invierno me indica que puedo ser el ermitaño capaz de irse andando al Tibet para vivir 8 años en la tranquilidad del NO YO. Son sólo sueños de un pobre pirata, pirata que desea realizar un viaje con su mujer a la búsqueda de los tesoros incalculables que sólo ella sepa valorar, esos tesoros que no pueden comprarse y que sólo los sabios saben disfrutar y sólo los más preciados príncipes saben regalar a sus princesas.

Amigo lector, recomiéndame un viaje para Marina y Juan. ¿serás capaz?

1 comentario:

Dant dijo...

A Brasil sin duda, pero con todo el club, brasiiiil